
El actor Nicolas Cage, protagonista de películas tales como Bangkok dangerous, Next, Ghost rider y Gone in sixty seconds, demandó a Samuel Levin, su gerente financiero, en veinte millones de dólares asegurado que él ha sido el único responsable de llevarlo a "la ruina financiera".
En una petición presentada en los tribunales de la ciudad de Los Ángeles, Cage aseveró que Levin ha sido tremendamente incompetente con su dinero y que sus malos manejos lo llevaron a vender activos importantes para poder cumplir con los más de seis millones de dólares en impuestos impagos que le reclama el fisco norteamericano y que corresponden sólo al año 2007.
El artista indicó que recién en el 2008, cuando despidió a su colaborador tras siete años de servicio, constató "su grave situación financiera", por la que debió vender un castillo en Alemania y una mansión en Beverly Hills.
Cage es uno de los actores más prolíficos de Hollywood que sólo el año pasado facturó cuarenta millones de dólares, según indicó en una nota la revista Forbes.
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